'La mente que se abre a una nueva idea, jamás volverá a su tamaño original'. Albert Einstein.
¿Qué motiva un niño/a de infantil? Podríamos hablar de cientos de estrategias, pero lo que está claro que lo que le motiva es aquello que le hace feliz, aquello que abre las puertas a su imaginación, a su creatividad y sus posibilidades de acción, como es el arte. El arte y la educación caminan conjuntamente, mano a mano, abriendo la mente a nuevas ideas.
Por tanto, partiendo de que todos los niños/as son artistas, nuestra labor como maestros debe ir dirigida a dejarles seguir siendo artistas una vez que crezcan y sintiéndose libres para expresar su mundo interior y reaccionar ante el mundo. Porque a estas edades disponen de un lenguaje muy precario, por lo que necesitan de otros recursos y herramientas para expresar su pensamiento y sus emociones. Además, el arte nos ofrece una amplio abanico de posibilidades con las que trabajar, como la que os presento a continuación:
PINTANDO CON CUERDAS
En mi clase siempre trato de trabajar las expresión plástica empleando distintas técnicas y materiales del entorno, con el fin de enseñarles también a darle usos diferentes a los elementos que nos rodean. Y una de esas técnicas es la que se conoce como 'STRING PULL PAINTING', muy sencilla pero con la que obtenemos unas imágenes preciosas.
Puesto que estamos trabajando distintos estilos artísticos y pintores característicos, como el cubismo de Picasso o el arte abstracto de Kandinsky, hemos trabajado esta técnica para comprender mejor qué significa eso de 'abstracto' y como podemos hacer que lo que pintemos sea diferente según los ojos con que se miren.
El simple hecho de pintar con una cuerda les llamó mucho la atención. '¿Con una cuerda, teacher?' De partida, yo sólo les expliqué los materiales que íbamos a utilizar y que íbamos a crear arte abstracto (lo que creo un diálogo) y nos pusimos manos a la obra. Yo llevé a cabo esta actividad trabajando por rincones, ya que es más fácil con pequeños grupos mientras el resto está realizando otras tareas.
¿QUÉ MATERIALES NECESITAMOS?
- Folios cortados por la mitad.
- Témpera de colores (llamativos preferiblemente).
- Cuerda (yo utilicé lana ya que es lo que tenía a mano).
- Celo para, cuando se seque, pegar las dos mitades.
¡MANOS A LA OBRA!
Los pasos son muy sencillos:
1. Ponemos un poco de pintura de cada color en fila sobre una bandeja.
2. Repartimos las dos mitades de cada folio y les pedimos que pongan su nombre.
3. Colocamos la cuerda sobre la fila de colores procurando que se manche lo suficiente pero tampoco demasiado.
4. Le pedimos al niño que coloque la cuerda sobre una de las dos mitades creando con la misma la forma que quiera.
5. Ponemos la otra mitad encima, hacemos presión (nos podemos ayudar de un libro) y pedimos que tire de la cuerda por uno o los dos lados, según prefiera.
6. ¡Separamos las mitades del folio para ver nuestra obra de arte!
7. Dejar secar y unir las dos partes con celo.
Al día siguiente, cuando se había secado y ya habíamos pegado las dos partes, hicimos una pequeña asamblea para repasar lo que era el arte abstracto. Yo aproveché que una de las niñas nos trajo un precioso cuadro que había hecho ella en sus clases de pintura, lo cual me vino genial para que vieran las diferencias entre un cuadro abstracto y uno que no lo es.
Después, uno a uno fue saliendo con su cuadro y fuimos diciendo qué es lo que veíamos. ¡Las impresiones fueron muy diferentes y algunas bastante originales!
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